Felipe Melo, centrocampista brasileño del equipo italiano Juventus ha manifestado que su primer deseo es convertirse en diácono de su iglesia, en su país.
En una entrevista concedida al diario italialino "La Stampa", Melo no duda de testificar su fe y manifestar su deseo de servir al Señor. Además manifestó que su segundo sueño es "ser campeón de Italia y del Mundo"
"Estoy estudiando con el objetivo de ser diácono de mi iglesia en Brasil, pero, para hacerlo, tengo que cambiar varias cosas, tengo que demostrar cada día que he cambiado. Por eso estoy estudiando la Biblia con un pastor brasileño misionero. Siempre he tenido fe, pero hacía cosas erróneas", afirma el futbolista.
Melo confesó que Dios lo ha cambiado "dentro y fuera del campo" y que gracias a su fe ahora se siente "más maduro, más tranquilo, mejor", porque no siente más "la gana de pelear con la gente", como hacía antes "por la calle o en la discoteca".
A pesar de ello aun está convencido que que en el campo las faltas pueden ser útiles. "No soy un atacante, soy un centrocampista defensivo... tal vez llegan Ronaldinho, Pato, Kaká o Cassano y no siempre consigues quitarles el balón de forma limpia, pero no puedes dejar que se vayan. Entonces, hago faltas, pero nunca para provocar daño".
Melo, fichado por el Juventus el pasado mes de julio, jugaba antes en el Fiorentina, está ansioso por disputar el partido de mañana de su equipo contra su ex club. "Hay sólo una posibilidad para que no juegue contra el Fiorentina, y es que el entrenador me deje fuera del campo", manifestó el futbolista.
Sin embargo, para Melo, el próximo choque de su club "es sólo un partido importante" y no quiere vengarse de sus ex hinchas que lo criticaron y lo acusaron de traición cuando traspasó al equipo de Turín, porque en Florencia se encontró bien. En cuanto a su ficha, que le valió 25 millones de euros, el centrocampista, que tiene 26 años, desveló que no se siente bajo presión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario